Vive la temporada de chiles en nogada 2025 en Balcón del Zócalo, con historia, sabor y vista inigualable.
En pleno corazón del Centro Histórico, frente a la majestuosidad del Zócalo de la Ciudad de México, hay un momento que los amantes de la gastronomía esperan con ansias cada año: la llegada de los chiles en nogada de Balcón del Zócalo. No se trata de un platillo más en el menú, sino de una experiencia que une memoria, tradición y una ejecución culinaria impecable.
El chef Pepe Salinas ha convertido esta receta en un ritual que se repite únicamente entre el 15 de agosto y el 15 de septiembre. Su origen está profundamente ligado a la cocina familiar: el relleno que preparaba su abuela paterna, perfeccionado y reinterpretado con toques personales, ha trascendido generaciones para convertirse en una cita obligada para locales y visitantes.
Un relleno que cuenta historias
La base del chile en nogada de Balcón del Zócalo combina carne de res y cerdo en partes iguales, una mezcla equilibrada que se enriquece con frutos secos y frutas frescas de temporada. Entre ellas, destacan el durazno criollo, la manzana panochera y la pera piña, una variedad originaria de Hidalgo que evoca recuerdos familiares del chef.
A estos sabores se suman piñón rosa y blanco, calabaza, pasas güeras, arándanos y chabacanos, logrando un balance preciso entre dulzor, acidez y untuosidad. En un gesto de respeto ambiental, la tradicional biznaga ha sido sustituida por jícama o huachacayote, frutas tropicales que aportan una textura similar sin poner en riesgo una especie protegida.
El chile poblano, protagonista absoluto
Cada pieza comienza su historia semanas antes, cuando se seleccionan los chiles poblanos directamente con productores, asegurando tamaño, uniformidad y calidad excepcionales. Apenas se blanquean para retirar la piel, conservando una textura crujiente que recuerda que el chile es, al final, una fruta. Un sutil ahumado con madera de encino rescata aromas de la cocina tradicional mexicana.
El comensal puede elegir la versión capeada o natural, ambas con el mismo relleno característico que ha conquistado paladares y generado lealtad año tras año.
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Una nogada con carácter
La nogada, elaborada con nuez de Castilla cruda, un toque generoso de Jerez y queso cotija, aporta una textura y sabor únicos. El queso cotija, presente en otros platillos de la casa, suma frescura e intensidad, resultando en una nogada equilibrada que abraza al chile sin ocultar sus matices.
La presentación rinde homenaje a la tradición: nueces frescas, granada abundante y perejil, acompañados por un listón tricolor que celebra las fiestas patrias.
Detalles que hacen historia
Desde hace cuatro años, cada chile lleva un número único. Este conteo, que ya supera las 3,500 unidades, convierte cada pieza en un recuerdo tangible. Junto a él, una tarjeta especial comparte historias sobre su origen, haciendo que cada comensal se lleve no solo un sabor, sino una memoria.
El precio de $850 incluye una tostadita de escamoles como bienvenida, un postre del menú y la posibilidad de elegir maridajes que van desde tequila y vino, hasta champaña o Jerez.
Una temporada limitada e irrepetible
La oferta de este platillo está estrictamente ligada al ciclo natural de la fruta y la granada, por lo que su disponibilidad se limita a un mes exacto. El cierre, la noche del 15 de septiembre, se vive como una celebración única que puede incluir la noche mexicana, hospedaje y un brunch para disfrutar del desfile patrio desde una de las mejores vistas de la ciudad.
En cada temporada, Balcón del Zócalo no solo sirve un chile en nogada; entrega una pieza de historia, un tributo a la tradición y una experiencia que se queda grabada en la memoria y el corazón.
Datos útiles
- Temporada: del 15 de agosto al 15 de septiembre 2025
- Lugar: Balcón del Zócalo, Centro Histórico, CDMX
- Precio: $850 por persona (incluye entrada, postre y maridaje opcional)
- Reservaciones: recomendadas con antelación, especialmente para la noche del 15 de septiembre
